Doel, ciudad fantasma, templo del Street Art.

Photo:Romany WG

La ciudad belga de Doen, cerca de la frontera con Holanda, convertida en población fantasma, es un gigantesco e impresionante museo vivo del street art. Un lugar que no os podéis perder si es que vuestros pasos os llevan por aquellos lares.

Una expropiación forzosa, debido a la ampliación del vecino puerto de  Antwerp y a la aplicación de una complicada ley medioambiental belga, hizo que los dos mil habitantes de esta villa se vieran forzados a abandonarla. En la actualidad solo los ocupas y algún empecinado vive allí.

Pero la ciudad se ha convertido en un destino obligado para muchos artistas callejeros que han utilizado sus muros como lienzo y la han transformado en el impresionante museo al aire libre que es hoy.

Entre otros muchos, destaca la presencia de Roa, con un gran número de obras.